“Cerrando brecha”: FIDA promueve soluciones hacia la igualdad de género en las organizaciones agrarias de Ecuador - Plataforma de Conocimientos LAC

“Cerrando brecha”: FIDA promueve soluciones hacia la igualdad de género en las organizaciones agrarias de Ecuador

22 septiembre 2022

La pasión por la agricultura sostenible está abriendo camino a procesos transformadores para impulsar la igualdad de género en las provincias ecuatorianas de Guayas y Morona Santiago. En este marco, el Programa Conjunto sobre Enfoques transformadores de género para la seguridad alimentaria, la mejora de la nutrición y la agricultura sostenible, que el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) desarrolla junto con la FAO y WFP, reunió a 33 organizaciones rurales y 10 técnicos gubernamentales de instituciones del país para facilitar talleres que permitieron promover procesos transformadores e impulsar la igualdad de género, además del empoderamiento social y económico de las mujeres en sus comunidades.
 
Este programa conjunto representa una inversión de US$1 millón y es financiado por la Unión Europea, con el objetivo de apoyar enfoques transformadores de género para acabar con el hambre, así como lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover la agricultura sostenible en Ecuador. A través de esta iniciativa, el FIDA fomenta la participación y el liderazgo de las mujeres rurales en los procesos de adopción de decisiones mediante la incorporación de una perspectiva de igualdad de género en las organizaciones agrarias. Esto, a su vez, empodera a las mujeres al fortalecer su compromiso con sus organizaciones y garantiza que tanto las mujeres como los hombres participen por igual en las actividades cotidianas.
 
La Directora Regional del FIDA para América Latina y el Caribe, Rossana Polastri, ha señalado al respecto que "es clave trabajar juntos por la seguridad alimentaria, la mejora de la nutrición y la agricultura sostenible, abordando las causas fundamentales de la desigualdad de género para poner en marcha procesos transformadores hacia la igualdad y el empoderamiento de las mujeres".
 
Cabe destacar que los talleres en Guayas y Morona Santiago utilizaron la metodología “Cerrando Brecha”, la cual fue desarrollada por el FIDA hace 20 años para reducir la brecha entre hombres y mujeres, para lo cual se contó con la participación de una especialista de Genero e Inclusión Social del proyecto Rural Adelante en El Salvador como facilitadora, dada la amplia experiencia de dicho país en la aplicación de la metodología. De este modo, se evidenció el énfasis en la Cooperación Sur-Sur: un componente esencial del modelo operacional del FIDA para promover la transformación rural inclusiva y sostenible en los países en vías de desarrollo.

Los facilitadores capacitados hoy están preparados para difundir esta metodología, incrementar la participación de las mujeres en los espacios de toma de decisiones, y promover que las organizaciones agrarias y las instituciones gubernamentales tomen medidas y compromisos concretos para lograr la igualdad de género.
 
José Palma, por ejemplo, asistió al taller “Cerrando Brecha”de Guayas en representación de ASODULVA, una organización que produce mermeladas artesanales elaboradas con fruta orgánica. Después de la capacitación, José señaló que la metodología refleja la visión de las asociaciones de pequeños agricultores y se comprometió a replicarla en su comunidad. En esta provincia, 17 organizaciones participantes del Proyecto FAREPS, financiado por FIDA, han recibido asistencia técnica para modernizar su infraestructura comunal y aprender sobre sostenibilidad, cambio climático e igualdad de género.
 
Mientras tanto, en Morona Santiago, el taller reunió a 15 organizaciones de productores, técnicos distritales, funcionarios públicos y juntas de derechos humanos del gobierno local ecuatoriano.
 
A la fecha, la metodología “Cerrando Brecha” ha contribuido a incrementar la participación y el liderazgo de las mujeres en más de 12 proyectos financiados por el FIDA en América Latina, y particularmente en El Salvador. Gracias a ello, las mujeres participantes han mejorado su autonomía económica y su acceso a los recursos y servicios agrícolas, y al mismo tiempo han conseguido tener una distribución más equilibrada del trabajo y las tareas domésticas.